febrero 12, 2006

faltan hembras, importemos

me vengo de ver "el caudillo pardo" de salvini, que se me había pasado desde que la exhibieron en el último festival de cine de la católica, y cada vez que la daban en algún otro lugar. qué pena, pero no me cuadró. quizás tenga que ver con las expectativas que yo guardaba... el filme es desroedando, y como que le sobra metraje. tal vez la intención haya sido precisamente el mantener un desodren, lograr que el personaje emerja súbitamente del patrón a primera vista inconexo, repetitivo —como esas figuras tridimensionales que aparecen de pronto en ciertas ilustraciones (¿stereogramas?) si uno fija la vista mucho rato... no lo sé. pero la película me pareció incluso un tanto tediosa. tiene sus chispazos, es cierto, como aquella secuencia con los maniquíes, o ver a Pohorylec argumentando por que sea el estado quien le consiga mujeres a los hombres. pero ahí nomás. en mi opinión el filme no va mucho más allá de su gusto por lo excéntrico, y tal vez el camino hubiera sido explorar aquello que el filme apenas sugiere: que el comportamiento del protagonista tiene sus raíces en una infancia difícil. de repente hubiera sido conveniente apoyar algo del peso del filme en opiniones ajenas (la esposa es una figura muda, por ejemplo: de nuevo, tal vez esa sea la intención, pero dirigir un filme es precisamente tomar decisiones buscando lograr aquello que todos los creadores desean, me imagino: conmover...) no sé. cada vez que veo una película me convenzo más de que debe ser increíblemente difícil hacer una.

en todo caso, a mí me pareció que "el caudillo pardo" es un poco como tener al costado a uno de esos patas que están contándote una y otra vez el mismo chiste... si alguien la acusara de superficial no me llamaría la atención. me gustó mucho el diseño de créditos, eso sí, y aquello de comparar la forma de tomar el micro con el saludo nazi. ingenioso. la manera de colocar la cámara un poco por debajo del entrevistado, para que él ladee la cabeza, le da cierta fuerza expresiva a su testimonio... la fijación por el rostro del protagonista: como dice mi amigo mario, "hay algo allí".

p.s.: últimas películas que he visto.
munich (steven spielberg) - dos estrellitas y media
brokeback mountain (ang lee) - ídem
this is spinal tap (rob reiner) - una estrellita
me and you and everyone we know (miranda july) - tres estrellitas
ghost world (terry zwigoff) - tres estrellitas y media

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si se te había ido pasando esta película no te ibas perdiendo de nada, realmente deja mucho que desear.

Anónimo dijo...

ummm, esa película recibió una que otra alabanza, ummm, ¿acaso Salvini es el Alonso Cueto del cine peruano? porque no creo que Lombardi sea el Alonso Cueto del cine peruano o ¿si? Entonces, ¿quién sería Salvini? Ummm, más bien Lombardi sería Ampuero y Salvini, Cueto, creo. Digo, por lo que Uds. dicen